9.21.2007

Mi PeRcePciOn EspaCiaL

Cuando somos pequeños, percibimos los espacios más grandes y al ser grandes contrastamos los recuerdos de ese mismo espacio y lo percibimos de tal manera que lo sentimos más pequeño.

He sufrido un cambio a lo largo de tres años y no me había percatado de ello, hasta que pude contrastar mi percepción actual con la pasada.

Acabo de realizar un viaje a El Salvador, después de casi tres largos años en los que he estado desenvolviendo mi vida como profesional en Barcelona. Siendo arquitecto, he buscado aprender una nueva arquitectura en la que se intenta dar a los espacios exteriores e interiores una dimensión que permita un libre desenvolvimiento del hombre. De acuerdo a mi formación puedo opinar que dichos espacios están a una escala monumental, y he podido darme cuenta de la relatividad de la arquitectura.
En Barcelona me encontré una gran ambición del proyectista en tratar de encajar en espacios reducidos una gran cantidad de actividades; pudiendo encontrar así espacios que dificultan la movilidad adecuada (baños, cocinas, dormitorios). A pesar de haber una normativa exigente en cuanto a superficies mínimas, he encontrado soluciones simples pero que yo no habia concebido anteriormente en espacios pequeños. Viendo todo esto con visión local, sería catalogado como dentro de la normalidad, sin embargo dentro de mi visión extranjera lo notaba insuficiente. Otras ambiciones que contrastan con lo anterior son: espacios únicos y diáfanos albergando todas las actividades posibles, permitiendo la libre movilidad tanto del hombre como de los objetos.

La vivienda es un caso de contraste que daría muchas paginas de comparaciones descritas, comparando un sistema de ciudad con viviendas unifamiliares (San Salvador) y otro de vivienda en altura (Barcelona). Aquí es donde a escala global se percibe el primer origen en el cambio de mi percepción espacial. En Barcelona al momento de interpretar la ciudad con visión local, hay un intercambio de proporciones que ajusta todo de manera que vuelve una ciudad en una cantidad incontable de piezas de lego, dudando así donde está el origen, el núcleo habitacional?, El solar edificable?, La manzana?.

En San Salvador el estilo de vida, no concretar los planes urbanisticos, falta de inversión por situaciones sociales, determinaron un crecimiento desordenado y con un planteamiento de viviendas unifamiliares debido a las condiciones territoriales. Responden así de manera funcional a “actividades separadas – espacios separados”, de manera que los espacios están segregados y tienen las dimensiones a veces muy justas para permitir las actividades. Hoy día está proliferando la gestión inmobiliaria, buscando y encontrando respuestas como la vivienda en altura, promovido por la inversión privada que sigue los ejemplos de paises desarrollados, con el factor en contra que esto conlleva, el incremento de los precios que hacen estas viviendas accesibles para pocas personas.

El otro punto de contraste es la diferencia en el tiempo de las dos ciudades... Arquitectura de época Colonial (San Salvador) y Post Modernismo, Arquitectura Gótica (Barcelona). Ambas escalas arquitectónicas son muy distintas, la primera más humana y terrenal y la segunda más monumental y densa. Dentro de cada una y de manera independiente existen estas mismas escalas, pero relativas y proporcionales a si mismas.

Ejemplo? Iglesia de época colonial – Iglesia del Gótico... una diferencia de dimensiones abismal. Cualquiera diría que es algo muy obvio, y por supuesto lo es, incluso parece absurdo mencionarlo. Sin embargo la manera en que esto cultiva a mi percepción espacial es interesante, la mente se recrea en dos percepciones de manera confusa, pero con mucha intención de razonar y comprender donde surge el cambio, y de la misma manera transformar lo aprendido antes y después, con el objetivo de buscarle un lugar a los conocimientos, para ubicar las nuevas sensaciones.

Desde que nací he vivido en San Salvador y proyectar con esas vivencias se vuelve escaso pero suficiente (contradictorio y acertado en la relativo). Escaso al llegar a una nueva ciudad y suficiente para proyectar en la misma ciudad. He ahí de la importancia del estudio y análisis de un lugar para iniciar un proceso creativo, que permita generar una arquitectura acorde al sitio; un ejercicio complicado de hacer en un corto período de tiempo, pero que en momentos determinados me he visto obligado realizar.

Comentando con colegas arquitectos salvadoreños, decimos que en San Salvador se le llama plaza a casi cualquier resquicio entre calles, perdiendo en mi opinión el verdadero significado y razón de ser. Percibir el espacio de una plaza en muchos casos es imposible porque ni se puede estar en ella. Pero cuando estás en una plaza de verdad, sientes su verdadero significado, un espacio accesible y hecho para personas y no monumentos.

Ahora mi percepción se detiene mucho mas que antes en proporciones, escalas y entorno, pero es imposible evitar sentir y notar ese cambio, dicho ejercicio me ayuda a entender y percibir la arquitectura de una manera mas individual, así como respetar más los criterios y soluciones de otros arquitectos.