7.23.2007

3 Años despues...

No se como empezar a contar mis sentimientos al haber vuelto a El Salvador casi 3 años después. Estoy emocionalmente muy afectado porque antes de ir tenía muchos miedos... algunos de los cuales los tuve que vivir.
Para comenzar el viaje fue así... salí de BCN un 7 de julio y llegué a SV el 8... y a la vuelta salí de SV el 20 de julio y llegué a BCN el 21 de julio. Los días que estuve fueron bien cortos y las cosas que hacer eran muchas.

Mi viaje estaba condicionado porque Marc me acompañaba, me sentía contento de que el pudiera conocer las maravillas que los salvadoreños recordamos con entusiasmo y alegría. Sin embargo ese era mi primer miedo, el iba por conocer algo totalmente nuevo y yo iba por estar con mi familia y mostrarle un poquito de SV... dos cosas muy incompatibles.

Ahora que estoy de vuelta pienso y siento que hubiera querido solo estar en casa comiendo con mi familia y disfrutando cada minuto con ellos, pero fue imposible... los pocos minutos que pude estar con mis papas hablando de cosas importantes los recuerdo y me digo que fuí egoista.

Pero bien, estoy de vuelta y siento que he cambiado en muchas cosas, desde mi percepción de los espacios y las cosas (hablaré de esto en otra ocasión), hasta recordar lo dificil que es para mi familia el día a día. Había olvidado el sacrificio que viven cada día, estos casi 3 años los siento como un gran cargo de conciencia porque llegar hasta donde estoy me ha costado, pero es incomparable con lo que han tenido que pasar allá.

Me duele mucho haberme perdido muchas experiencias de esos años, me duele mucho saber que voy a perderme más cosas, quisiera poder estar ahí muchos fines de semana como quien viaja de barcelona a madrid, pero no puedo, aunque ahora pienso que prefiero perderme lo desconocido y disfrutar de mi familia ahora que la tengo, ya tendré tiempo después para lo demás, prefiero invertir en ello que en algo más y lo haré.

Otro de mis grandes miedos era el reencuentro y la despedida... lo primero fue más que bien, pero lo segundo estuvo a punto de hundirme en el llanto más profundo. Porque llega ese momento en el que sabes que hay muchas cosas que quieres decir, que debiste haber dicho durante todos los días y que en ese momento te tragas las palabras y solo te miras a los ojos con tus padres y aguantas como puedes y te marchas. Me tragué las palabras y una vez más no dije un te quiero y un los voy a extrañar mucho, aunque con los abrazos que nos dimos eso queda implícito. Mi corazón y diosito me dicen que tendremos más oportunidades para podernoslo decir y no las voy a desaprovechar.

Si no lo dije ahí en el aeropuerto lo diré de hoy en adelante, los quiero mucho y los extraño cada día más, me hacen mucha falta, quisiera poder estar más cerca y poder disfrutar cada día en familia. Quiero que ese día llegue pronto, porque algún día regresaré. Mientras espero forjar un buen futuro para que estemos todos juntos en el.

Gracias papá y mamá por demostrar esa valentía en la despedida, se que ha sido duro y aun se siente feo, pero seguro que nos veremos muchas veces más, tengo fe de que será así. Gracias a mi hermana y mi hermano por hacerme sentir como si nunca me fuí de casa. Gracias por recibirme y hacerme sentir tan bien esos pocos días y aguantar mi egoismo al no estar siempre en casa. Los quiero mucho a todos y los extraño siempre.